Este blog a
priori, es un blog dedicado a hablar de los EPIS y de la ropa laboral, y no sé muy
bien, si este post, terminará estando relacionado con dicho gremio o terminaré
hablando de mi vida personal que de una forma u otra me une a esta familia de
Gallegos-santanderinos…
Marcelino,
profesión y vocación marinero nació en Ares provincia de La Coruña allá por el 1936.
Comenzó a
navegar a los 22 años en 1958 como marino mercante, siendo mecánico naval.
He conocido
a Marcelino, media vida, ya que soy íntimo amigo, como un hermano podríamos
decir, de su hijo Francisco, para mi Fran.
Marcelino se
iba de casa seis meses seguidos a trabajar fuera de la ciudad que le acogió,
Santander, como muchos otros gallegos “gente hecha de otra pasta” y conoció y
recorrió debido a su profesión medio planeta, posiblemente no existe puerto de
carga que no conociera Marcelino.
Por aquellos
tiempos los EPI´s eran simplemente inexistentes, salvo los más obvios. En
aquellos años, simplemente se vivía para trabajar y no se trabajaba para vivir,
sin pensar, que las locuras que cometemos hoy, nos pasan factura mañana. En aquellas
décadas como mucho un mecánico mercante, se vestía con un buzo o mono azulina,
para protegerse de la grasa y quizás unos guantes pero poco más, ni auriculares contra el ruido, ni
gafas anti impactos, ni ropa de protección ignífuga, ni mucho menos calzado
laboral de seguridad.
Marcelino
jamás usó protectores para los oídos, cuando reparaba motores en las tripas de
los mercantes, para que os hagáis una idea hay motores que son como un chalet
de varias plantas, el ruido del traqueteo sumado al calor existente en el
interior de un buque décadas atrás era insufrible.
De haber
sabido Marcelino que los años y la edad lo dejarían totalmente sordo, de seguro
que de joven hubiese puesto remedio, de haber tenido medios, claro. Hoy en día
por poco más de 10 euros, se hubiese evitado la incapacidad.
No nos
hacemos a la idea de lo grave que es quedarse sordo hasta que vemos a un hombre
que hasta hace bien poco, que se subía a una escalera a podar palmeras, se
queda totalmente aislado del mundo por la sordera a una edad en la que ya poca
cosa te satisface, y que quedas impedido para ver un telediario o una simple película,
todo ello provocado por la edad y sobretodo por años de ruidos de motores
gigantes en el interior de un buque, yo he estado en alguno alguna vez, de
visita y no es posible aguantar más de unos minutos, los marineros de aquellos
años se metían en esas tripas durante horas, días seguidos repitiendo la
operación, meses y años, sin protección alguna.
Como
Marcelino hubo muchos hombres y oficios insufribles y gracias a ellos hoy tenemos la vida que
tenemos, la gente del pasado ha hecho nuestro presente y nosotros haremos el
futuro de otros, más o menos cómoda.
Cierto es que a medida que pasan las décadas, la sociedad, busca mejorar la
calidad de vida de los operarios en el trabajo, ya sea con aires
acondicionados, calefacciones, protecciones, vestuario acorde a su profesión,
herramientas hidráulicas y calzado de seguridad especial de trabajo.
Un simple
ejemplo que a priori parece banal, hoy en día gracias a los satélites, un buque
puede perfectamente esquivar una tormenta ya que sabe la ruta que deben seguir
con días de antelación, los motores y máquinas, sufren mucho con ellos, con los
temporales, cuanto menos sufre un motor, menos horas de reparaciones se tendrán
que echar, con lo que exponemos menos tiempo a nuestro cuerpo a la agresividad
de ruidos y posibles accidentes.
Cuidado que
a día de hoy sigue habiendo mucha gente aunque parezca mentira siguen
cometiendo errores, hay muchos trabajadores que buscan siempre el calzado
laboral, el más económico y a la larga les pasará factura con problemas de
cervicales, espalda y posibles enfermedades y deformaciones de pies.
Sólo nos
acordamos de Santa Bárbara cuando truena, pero en lo que a prevención laboral
se refiere, cuando truena, la solución es complicada.
A día de hoy Marcelino vive a la edad de 86 años, me siento un privilegiado haber conocido a dicho señor. Gracias Marcelino, a ti y a tantos otros que nos allanasteis el camino que surcamos a día de hoy.
In memoriam (Marcelino Martínez) Santander 22 de Julio 2023
En
Epiformes, llevamos décadas trabajando, uniformando y suministrando EPI´s, si
tienes dudas, déjanos asesorarte.