En muchas ocasiones, menos es más y eso incluye  la personalización de la ropa laboral de tu empresa o negocio.

Es frecuente, cometer el error, de querer personalizar los uniformes, con logotipos, nombres y textos, muchos textos.

En muchas ocasiones se pretende amortizar al máximo la ropa laboral y pensamos que cuanto más bordemos por el mismo precio en el mismo espacio, saldremos ganando como empresa, nuestra ropa hará más publicidad, y esto es un gran error, porque el resultado es una masificación de texto, que nadie leerá y sólo hará que el nombre y el logotipo de nuestro negocio, pierdan fuerza y vistosidad.

Cuando personalizamos los uniformes de trabajo, no se hace con la intención de hacer publicidad al cliente exterior, se trata de hacer marca y dar cierta entidad y empaque a nuestra empresa, gracias a la homogeneidad que nos brinda un uniforme personalizado en toda la plantilla, denota, seriedad y profesionalidad. Como se suele decir: No basta con ser profesional, también hay que parecerlo.

En esta ocasión bordamos en cuello el nombre de nuestra clienta en una chaqueta de cocina básica, de las más vendidas y más económicas y lo cierto es que un bordado simple como es este, le dan a las chaquetas cierta elegancia sin más pretensiones.