Cuando uno no se encuentra bien de salud , suele ir al médico y una de las pruebas más comunes es medir su  tensión arterial  (Presión que ejerce la sangre sobre las paredes de las arterias en su paso por estas) dicha medición puede en ocasiones ser confusa o errónea debido al síndrome de la bata blanca o hipertensión de la bata blanca  que se manifiesta según la proximidad del paciente a un centro médico o a un facultativo regresando a la normalidad a medida que el enfermo se aleja del médico , dicho de otra forma, el paciente se estresa y da mediciones elevadas de tensión arterial por la presencia de un médico. Los cambios en las medidas de presión arterial van acompañados de forma progresiva con aumentos en la frecuencia cardíaca.

No sé si en alguna ocasión lo habéis vivido dado que no todos los médicos lo suelen usar, pero recuerdo un dentista de Jerez de la Frontera que independientemente de la intervención a efectuar en tu boca suele ponerte en el dedo un aparatito que va midiendo tu frecuencia cardíaca y tu mismo la vas viendo en un monitor, curiosamente a medida que el facultativo se acerca, sin aun haber actuado , vas viendo como dicha frecuencia aumenta, disminuyendo si por contra se aleja y sale de la sala donde te encuentras.


Se estima que al menos el 30% de la población padece este síndrome sin saberlo, dicho estrés viene provocado por el miedo a que el médico nos de una mala noticia en su diagnóstico , ya os podéis imaginar , los seres humanos perdemos media vida preocupados en pensar que algo malo puede ocurrir y dichas funestas predicciones jamás nos llegan, pero el miedo y las fobias no son sencillas de controlar. Se puede enfermar por el simple hecho de pensar que estamos enfermos aunque estemos sanos a priori como una pera.

Al parecer los dos grandes grupos de posibles hipertensos por la bata blanca, podrían ser las mujeres y los jóvenes aunque no existe unanimidad en esto ya que distintos estudios discrepan de plano y otras fuentes se lo achacan a varones adultos, dicha afección puede en la mayoría de las ocasiones verse incrementada si quien toma la presión arterial es un médico de prestigio vestido de paisano, se cree que existe una relación entre prestigio social y aumento de dicha presión, es decir cuanto mayor es el reconocimiento del médico en cuestión más posibilidades existen de que no se equivoque y nos de un resultado no esperado, un círculo vicioso absurdo de justificar, pero existente.

La solución a medias en principio sería que dichas mediciones sean tomadas por el gremio de la enfermería del sexo femenino, esto aleja de nuestra mente el perfil del típico  médico varón.




Esta fobia fue descrita por primera vez en 1897 por el médico italiano Scipione Riva-Rocci quien a su vez mejoró el tensiómetro inventado por el médico Samuel Siegfried Karl Ritter von Basch en 1881







Para descartar este fenómeno cuando se sospecha en un paciente se recurre a la monitorización ambulatoria de la presión arterial , a través de un dispositivo que va obteniendo valores de presión arterial cada cierto tiempo durante 24 horas mientras el paciente realiza su rutina diaria.