La historia de la chaqueta de cocinero tal y como la conocemos hoy en día.
Todo en la vida tiene razón de ser , bueno o casi todo , en este caso si lo tiene.
En Epiformes.com tenemos los sentimientos muy encontrados y por ello en ocasiones aconsejamos un tipo de indumentaria laboral para el chef de cocina alegre estampada con diferentes aberturas botones y coloridos y en otras apostamos o más bien aconsejamos la típica ropa de cocinero de la línea blanca a juego con gorros de cocina y delantales de hostelería igual de blancos e impolutos , cierto es que todo depende mucho del tipo de establecimiento y de la personalidad del chef en cuestión.
Como decía todo va a depender en gran medida y a priori del tipo de negocio y digo a priori por tratar de buscar una disculpa o justificar el tipo de ropa laboral que usamos en nuestro trabajo , se entiende que en una pizzería buscaremos vestir con chaquetas de cocina de estampados alegres y juveniles y en restaurantes de más alto nivel en cuanto al tipo de gastronomía se refiere , lo haremos de blanco impoluto con grandes gorros de cocina tubulares, delantales de hostelería a juego y chaquetas de cocinero de doble botonadura , este tipo de vestimenta laboral siempre da sensación de limpieza y pulcritud y obliga a los chefs de cocina a cambiarse el atuendo a menudo dado que las manchas son rápidamente perceptibles al trabajar cerca de los fogones.
Precisamente no sería hasta mediados del siglo XVIII cuando el chef francés Marie-Antoine Carême sentara las bases de los uniformes de cocina de hoy en día. Antoine rediseño las chaquetas de cocina para que las pudiéramos conocer tal y como hoy las conocemos , chaquetas blancas de doble botonadura con el fin de ir intercambiando los botones y ojales y así poder tapar las manchas y darle un uso más prolongado a las vestimenta, grandes gorros plisados tubulares , los más altos para los maestros y los cortos para los aprendices y ayudantes.
Este tipo de vestimenta para los chefs de cocina se prolongaría en el tiempo hasta los años ochenta del siglo pasado donde se comenzaron a incorporar divertidos estampados y diversos colores.
Carême fue conocido principalmente por ser el primer estudioso de las salsas en la cocina francesa entre otras artes. Merito tuvo dado que fue abandonado por su padre a la edad de diez años debido a que pertenecía a una familia pobre con veinticinco hermanos que a duras penas podía sobrevivir.
Carême logró salir adelante gracias a un hostelero de la época que se apiadó de el y le apadrinó como ayudante en la taberna “La Fricasé de Lapín” a los 16 años abandonó dicho establecimiento para trabajar “Chez Bailly” cuyo propietario le empujo a que aprendiera a leer y se formara ya no sólo en el noble arte de la cocina si no también en arquitectura , dichos estudios le permitieron hacerse un hueco en la historia de la gastronomía europea llegando a cocinar para Napoleón , el Zar Alejandro I de Rusia o el futuro rey de Inglaterra Jorge IV , terminaría prácticamente sus días al servicio del embajador austriaco Rothschid y su familia y fue en 1833 cuando falleció debido a una grave enfermedad. Venta de ropa laboral epiformes